2 Poemas que hablan de resiliencia (y una cita científica que te hará pensar)

poemas sobre resiliencia

Hoy me gustaría hablarte de aquellas poemas sobre resiliencia y que han quedado para la posteridad, siendo una total inspiración para cualquier etapa de la vida en la que necesites un poco de confort y ánimo.

Poemas sobre resiliencia

Una de los poemas sobre resiliencia más conocido resultó ser «Si» de autoría correspondiente a Rudyard Kipling. Seguro que la leíste alguna vez. Decía así:

«Si…

Si puedes mantener la cabeza en su sitio cuando los que te rodean

la han perdido y te culpan a ti.

Si puedes seguir creyendo en ti mismo cuando todos dudan de ti,

pero también aceptar que tengan dudas.

Si puedes esperar y no cansarte de la espera;

o si, siendo engañado, no respondes con engaños,

o si, siendo odiado, no incurres en el odio.

Y aun así no te las das de bueno ni de sabio.

Si puedes soñar sin que los sueños te dominen;

Si puedes pensar y no hacer de tus pensamientos tu único objetivo;

Si puedes encontrarte con el Triunfo y la derrota,

y tratar a esos dos impostores de la misma manera.

Si puedes soportar oír la verdad que has dicho,

tergiversada por villanos para engañar a los necios.

O ver cómo se destruye todo aquello por lo que has dado la vida,

y remangarte para reconstruirlo con herramientas desgastadas.

Si puedes apilar todas tus ganancias

y arriesgarlas a una sola jugada;

y perder, y empezar de nuevo desde el principio

y nunca decir ni una palabra sobre tu pérdida.

Si puedes forzar tu corazón, y tus nervios y tendones,

a cumplir con su deber mucho después de que estén agotados,

y así resistir cuando ya no te queda nada

salvo la Voluntad, que les dice: «¡Resistid!».

Si puedes hablar a las masas y conservar tu virtud

o caminar junto a Reyes, sin menospreciar por ello a la gente común.

Si ni amigos ni enemigos pueden herirte.

Si todos pueden contar contigo, pero ninguno demasiado.

Si puedes llenar el implacable minuto,

con sesenta segundos de diligente labor…

Tuya es la Tierra y todo lo que hay en ella,

y -lo que es más-: ¡serás un Hombre, hijo mío!»

Este poemas de resiliencia, un ejemplo de lo que la constancia, el esfuerzo y la fe pueden lograr en cualquier espíritu deseoso de alcanzar su mejor versión y tiempos que realmente sean reveladores.

Un mensaje, quizás, que también sugiere la importancia de ser persona antes que poseer cualquier título o cualidad, algo muy revelador también para llegar a ser alguien resiliente, fortaleciéndose gracias lo que uno puede alcanzar comprendiendo lo que es desde dentro, sin artificios ni egos, trabajando desde la humildad y grandeza de la autenticidad.

A pesar de todo esto, no solo los científicos y escritores occidentales tuvieron tiempo para reflexionar sobre la resiliencia, sino que también los artistas orientales dedicaron tiempo de su vida para poder saber cómo podían describirla y despertarla en los demás así como en ellos/as mismos/as.

Un buen ejemplo son los haikus (pequeñas poesías de origen japonés que hablan de metáforas relacionadas con problemáticas y filosofías de la vida, siempre recurriendo a las imágenes de la naturaleza y todo lo que la compone) de Kobayashi Issa, quien dejó escrito que:

«Un mundo de dolor y pena,

las flores florecen,

incluso entonces.»

Una excelente y minimalista reflexión a la capacidad para resurgir de las cenizas y a la cualidad de saber dar la mejor versión de uno/a mismo/a sin depender de lo terrible que sea la situación por la que se esté pasando.

Citas sobre resiliencia

En su día, aunque no tanto a camino de la poesía, Charles Darwin también predijo una realidad que ponía en manifiesto la importancia de ser resiliente. En su obra «El origen de las especies» compartió (sobre la resiliencia):

«No son los más fuertes de la especie los que sobreviven, ni lo más inteligentes. Sobreviven los más flexibles y adaptables a los cambios.»

Ya sabes, cada semana iremos compartiendo textos y poesías relacionadas con la resiliencia para que puedas deleitarte con ellas y sobre todo compartiéndolas, generando un mundo mucho más pacífico y bonito. ¡Así que comparte!

Y no olvides ser persistente sinónimo de resiliencia, al fin de alcanzar ese estado optimo que es ser feliz con uno mismo…